El gato vomita a menudo

Los gatos son expertos en ocultar el dolor, pero cuando vomitan tendremos que preguntarnos por qué les ocurre esto y qué podemos hacer para que vuelvan a estar sanos. Y es que que tu peludo vomite bilis no sólo no es normal, sino que puede ir acompañado de otros síntomas.

Un gato puede vomitar de vez en cuando y no pasarle nada en absoluto, igual que nosotros cuando, por ejemplo, nos metemos algo en la boca que tiene un sabor muy desagradable y nuestro cuerpo lo rechaza obligándonos a vomitarlo. Pero en otras ocasiones es una señal de que algo va mal y de que el animal necesita ayuda.

En primer lugar, sepamos qué es la bilis. Pues bien, la bilis es un ácido producido en el hígado que ayuda a digerir los alimentos. Es de color amarillo-verdoso, y a veces el felino la expulsa junto con otros líquidos que están en su estómago. La pregunta es ¿por qué?

Lo ideal es dejar siempre el comedero lleno de comida. Piensa que los gatos en la naturaleza comen… cuando pueden, un ratón, un pajarito… y así a lo largo del día. Cuando viven con humanos, hacen lo mismo: comen un poco por la mañana temprano, un poco al mediodía, un poco a media tarde y un poco por la noche (más o menos).

Vómito de bilis

La bilis es una sustancia amarilla o verde producida en el hígado del gato, que ayuda a la digestión de los alimentos. Los vómitos con bilis en los gatos pueden ser una condición alarmante tanto para el felino como para el propietario preocupado.    Los vómitos con bilis pueden ser especialmente difíciles de reconocer para un propietario, dado que los animales suelen limpiarse a sí mismos, a menos que se consiga pillar a su gato en el acto de vomitar. Esto puede dificultar la determinación exacta de la duración de la afección. Es importante conocer los signos y síntomas que pueden aparecer con los vómitos de bilis para determinar cuándo es necesaria la intervención veterinaria.

En muchos casos, se desconoce la causa exacta de los vómitos con bilis. Sin embargo, hay varias condiciones que pueden causar la condición y que deben ser descartadas por su veterinario. Las causas más comunes pueden ser:

Lo primero que hará su veterinario para diagnosticar la causa de los vómitos con bilis es pedir el historial de su gato en relación con la afección. Por ello, es importante que documente el número de veces, la frecuencia y la fecha aproximada de inicio de los vómitos. Además, debe recoger una muestra de heces y orina, si es posible, y proporcionar a su veterinario la marca y la receta específica de cualquier alimento comercial para gatos que le haya dado.

Diarrea y vómitos del gato

Si tienes gatos, seguramente habrás visto a alguno de ellos vomitar alguna vez. Es habitual que los gatos vomiten, pero nunca es normal que lo hagan. Dicho esto, tampoco es siempre algo que deba tratarse, ni es necesario llevar al gato al veterinario cada vez que vomita. En este recurso, obtendrá la primicia sobre cuándo llevar a un gato que vomita al veterinario, por qué los gatos vomitan y qué tratamientos están disponibles para ayudar a los felinos a sentirse mejor.

Los vómitos pueden dividirse en dos grandes categorías: vómitos crónicos y agudos. Los vómitos crónicos son aquellos que se producen con cierta regularidad (al menos mensualmente, pero pueden ser diarios) durante un largo periodo de tiempo. El gato suele vomitar sólo una o dos veces en cada ocasión. Cuando un gato que normalmente no vomita empieza a hacerlo, es del tipo agudo. Por lo general, esto es una preocupación para usted y su veterinario sólo si el gato vomita varias veces. El diagnóstico y el tratamiento de los vómitos agudos y crónicos pueden diferir, al igual que la urgencia de llevar al gato al veterinario.

El gato vomita agua

A ningún padre de mascotas le gusta escuchar ese sonido: el ruido de los golpes de la otra habitación que te indica que vas a tener un lío que limpiar. Cuando su gato empieza a tener arcadas, el primer pensamiento que puede pasar por su cabeza es: “Oh no, ¿qué se ha metido ahora?”. Hay muchas razones por las que su gato puede vomitar, algunas más graves que otras. Como padre de una mascota nueva, es importante conocer las razones por las que su gato puede estar vomitando y cuándo un vómito justifica una visita al veterinario.

Aunque los vómitos de un gato pueden deberse a que se ha comido una parte de una planta de interior o ha ingerido un trozo de un juguete, su gato puede sufrir un malestar estomacal por la ingestión de pelo procedente del aseo. La mayoría de las veces esto aparece como una bola de pelo.

Aunque es normal que un gato vomite una bola de pelo de vez en cuando, hay ocasiones en las que hay que preocuparse. Las bolas de pelo no deberían ser dolorosas, frecuentes o difíciles de expulsar para su gato. Las bolas de pelo no tratadas también pueden ir en sentido contrario y causar dolorosos bloqueos intestinales en casos extremos, según el Centro de Salud Felina de Cornell , así que mantén un seguimiento de la rutina normal de tu gato y estate atento a los signos de estreñimiento, letargo y anorexia si no ha expulsado una bola de pelo en un tiempo. Si su gato tiene un problema constante con las bolas de pelo, es posible que desee buscar un alimento para gatos que esté formulado para las bolas de pelo.

Por Sofía Salome

Hola mundo, soy Sofía Salomé copywriter de Damboats.es