Tabla de caca de gato

No es un tema divertido del que hablar, pero tal y como afirma un popular libro infantil, todo el mundo hace caca. Dado que tu gato no puede decirte si tiene problemas de eliminación, depende de ti vigilar la caja de arena, no sólo para mantenerla limpia, sino para fijarte en el aspecto, el olor y la frecuencia de sus desechos. Las deposiciones de un gato deben estar bien formadas, ser relativamente húmedas, de color marrón oscuro y sin restos de mucosidad o sangre. La caca de su gato tendrá seguramente un olor, pero no debería ser insoportable.

Los gatos alimentados con comida de baja calidad pueden tener deposiciones más frecuentes o más grandes porque una mayor parte de la comida acaba siendo inutilizada por el organismo. Los gatos alimentados con demasiada comida también pueden tener deposiciones más frecuentes y/o grandes. Los cambios bruscos de comida pueden provocar un cambio en la frecuencia de las cacas de su gato, ya que suelen causar diarrea. Los cambios de comida deben hacerse gradualmente, mezclando un poco de la nueva comida con la receta actual a lo largo de varios días. Las alergias alimentarias también pueden causar diarrea y aumentar la frecuencia de las defecaciones.

Mi gato tiene caca líquida todo el tiempo

La diarrea de los gatos presenta distintos niveles de gravedad. Las heces anormalmente blandas pueden ser desde incompletas hasta “blandas”, pasando por líquidas o hemorrágicas. La diarrea del gato, al igual que la del ser humano, se produce cuando las porciones residuales no digeribles de los alimentos pasan por los intestinos con una rapidez anormal, o cuando el intestino grueso añade un exceso de líquido a las heces.

Desde el punto de vista práctico, existen varias causas de la diarrea del gato. A veces, la diarrea del gato puede ser un problema relativamente menor, como una reacción leve a un cambio de dieta. Una indiscreción dietética leve también puede causar diarrea en el gato. Cuando era niño, tenía una gata que era intolerante a la lactosa; en las pocas ocasiones en que intenté crear una escena al estilo de Norman Rockwell ofreciéndole un plato de leche (¡nunca se debe dar leche de vaca a un gato!), ella creó una escena muy poco al estilo de Rockwell en la caja de arena.

El estrés es otra posible causa (la diarrea del gato puede producirse si algo lo asusta literalmente). Y, por último, hay problemas más graves que pueden causar diarrea en los gatos. Éstos van desde cuestiones tratables, como parásitos e infecciones intestinales leves, hasta problemas más graves, como la exposición a toxinas, la presencia de objetos extraños en los intestinos, enfermedades hepáticas o renales, enfermedades intestinales inflamatorias (también conocidas como enfermedades intestinales infiltrativas, o simplemente EII), y cánceres como el linfoma o el adenocarcinoma intestinal.

Gato que hace caca con una sustancia gelatinosa

Todo el mundo hace caca, incluidos los gatos. ¿Pero su gato hace suficiente caca? ¿Qué aspecto tienen las cacas sanas de los gatos? ¿Y qué pasa si esas cacas acaban fuera de la caja? Siga leyendo para obtener las respuestas a todo lo que siempre ha querido saber sobre las cacas de los gatos, pero tenía miedo (¡o tal vez demasiado asco!) de preguntar.

No existe una frecuencia u horario específico para que los gatos hagan caca. Sin duda, varía de un gato a otro. También puede cambiar para los gatos individuales si están sufriendo una enfermedad, se sienten estresados, o han tenido un cambio en la dieta que está afectando a su sistema digestivo.

Como regla general, los gatos hacen caca una o dos veces al día. Si su gato hace muchas más cacas o falta un par de días seguidos, no es mala idea hablar con su veterinario. Puede tratarse de la rutina normal de su gato, pero también podría indicar que le ocurre algo.

Las cacas sanas suelen ser de color marrón oscuro y no son ni demasiado blandas ni demasiado duras. Si es blanda o sólida como una roca, su gato podría tener un problema de salud. Si es acuosa, es probable que su gato tenga un ataque de diarrea, que puede ser causado por:

Guía de heces del gato

Cualquier condición médica que interfiera con el comportamiento normal de orinar o defecar de un gato puede causar problemas en la caja de arena. La inflamación del tracto urinario, por ejemplo, puede hacer que orinar sea doloroso y aumentar la frecuencia y la urgencia de la micción. Estas experiencias pueden hacer que un gato orine o defeque fuera de la caja de arena, sobre todo si asocia la caja de arena con el dolor. Las enfermedades renales y tiroideas, así como la diabetes mellitus, también son posibles culpables de que el gato no utilice la caja de arena, ya que suelen hacer que beba más y orine con más frecuencia. Del mismo modo, los problemas del tracto digestivo pueden hacer que a un gato le resulte doloroso defecar, que aumente la frecuencia o la urgencia y que disminuya el control de la defecación. Por último, las enfermedades relacionadas con la edad que interfieren con la movilidad del gato o con sus funciones cognitivas pueden influir en su capacidad para llegar a la caja de arena a tiempo.

Un gato con aversión a su caja de arena suele eliminar en diversas superficies. Puede encontrar charcos de orina o heces en superficies blandas como alfombras, camas o ropa, o en superficies duras como suelos de baldosas o bañeras. Dependiendo de las ganas que tenga su gato de evitar la caja de arena, es posible que siga utilizándola, pero sólo de forma inconsistente.

Por Sofía Salome

Hola mundo, soy Sofía Salomé copywriter de Damboats.es