¿funcionan los etólogos caninos?

Seguramente, si tienes un perro que se comporta de forma extraña o que siempre ha sido muy normal y de repente se ha puesto un poco nervioso o agresivo, tus amigos o el veterinario te han recomendado que acudas a un etólogo canino. Pero, ¿sabes qué es la etología?

Los etólogos son personas que han cursado la carrera de biología animal o veterinaria con una especialización o rama en etología. La etología estudia el comportamiento de los animales en su entorno natural, sus conductas y el porqué de las mismas.

Para corregir el comportamiento de un perro que se ha vuelto extrañamente agresivo o nervioso, por ejemplo, es necesario saber qué ha provocado su cambio de comportamiento. Sin conocer el origen, será imposible corregir el comportamiento para solucionar el problema y aquí es donde entran los etólogos caninos.

La respuesta a la pregunta es muy sencilla: cuando las cosas van mal. Si tenemos un perro que ladra continuamente, que se ha vuelto agresivo o peligroso, que no respeta a un miembro de la familia, que se ha puesto nervioso o que simplemente ha cambiado su comportamiento de forma incorrecta…. Es entonces cuando hay que acudir a un etólogo.

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Los adiestradores están muy versados en la teoría del aprendizaje. Esto es por una buena razón, porque una base sólida en el condicionamiento instrumental es esencial para poder cambiar eficazmente el comportamiento de los perros. Sin embargo, no es lo único que importa. Hay muchos otros aspectos del comportamiento que también son importantes. Entre ellos están el desarrollo, el estrés, el comportamiento típico de la especie y la cognición. Antes de entrar en detalles a este respecto, empecemos con un poco de historia.

La investigación del comportamiento despegó realmente a principios del siglo XX. Muchos en este campo están familiarizados con el trabajo de John Watson y B.F. Skinner sobre el conductismo, el estudio de la adquisición de la conducta mediante el refuerzo y el castigo. La mayor parte de la investigación sobre el conductismo tenía lugar en Estados Unidos. Esta investigación se realizaba en gran parte en laboratorios y se centraba en encontrar principios generales de aprendizaje que se aplicaran a todas las especies. Se prestó mucha atención al papel del entorno en la producción de la conducta. Watson, Skinner y otros en su campo cambiaron y avanzaron fundamentalmente nuestra comprensión del aprendizaje y el comportamiento y la investigación en este campo sigue siendo muy activa hoy en día.

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El comportamiento canino estudia el comportamiento del perro en el entorno natural y humano, revisando el comportamiento del perro doméstico, los perros asilvestrados y las especies relacionadas, lobos, dingos, perros salvajes africanos y chacales.

Este curso se basa en hechos y conocimientos adquiridos a través de estudios científicos. Disipará muchos conceptos erróneos y dichos infundados y comunes. No es un curso de adiestramiento de perros, sino un curso de comportamiento canino. Dado que el adiestramiento implica modificar el comportamiento de un animal, es esencial entender primero su comportamiento natural antes de empezar a cambiarlo. Por lo tanto, le recomendamos que realice este curso antes de cualquier otro relacionado con la modificación del comportamiento.

Principiante-Intermedio. Este es un curso importante para todos los adiestradores de perros. Tenemos que entender el comportamiento normal del perro antes de esperar poder implementar con éxito cualquier técnica de modificación del comportamiento. El adiestramiento de perros está lleno de mitos y cuentos de viejas que se parecen poco o nada a la realidad que ha contribuido a la evolución del comportamiento canino. Este curso se lo aclarará.

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“Mi perro es dominante…” es una expresión bastante común hoy en día para describir el carácter de un perro. Se utiliza para animales que tiran de la correa, saltan al sofá/cama, cruzan la puerta antes que sus dueños o muestran comportamientos no deseados hacia otros perros o personas en determinados contextos.

La dominancia se define como el porcentaje de éxitos de un perro cuando compite por los recursos con otro individuo – “recurso” significa comida, juguetes, agua, caricias… Por lo tanto, la dominancia – sumisión es algo que ocurre entre 2 animales, no el rasgo de carácter de un individuo. Además, el animal dominante en la disputa por un recurso no gana necesariamente todas las veces.

El término dominancia se ha utilizado durante mucho tiempo, de forma incorrecta, debido a la teoría del macho/hembra alfa – el líder de la manada. Esta teoría defiende que algunos animales que nacen con un temperamento dominante, y su objetivo es ocupar el rango más alto en la jerarquía de la manada – ya sea compuesta por otros perros, humanos o ambos -. Para ello, recurren con frecuencia a la agresividad.

Sofía Salome

Hola mundo, soy Sofía Salomé copywriter de Damboats.es