Toxinas que causan insuficiencia hepática en los perros

Las anomalías de la circulación pueden deberse a varias causas y pueden dar lugar a un shock circulatorio, una situación de emergencia. Todos los tipos de shock circulatorio responden hasta cierto punto a la administración de fluidoterapia, pero algunos tipos requieren medicamentos adicionales. ¿Qué tipo de shock circulatorio se maneja más fácilmente sólo con fluidoterapia?

El hígado es un órgano que realiza numerosas funciones. Tiene una gran capacidad de almacenamiento y reserva funcional y es capaz de regenerarse. Estas propiedades proporcionan cierta protección contra el daño permanente. Sin embargo, el hígado también es susceptible de sufrir lesiones debido a su función de metabolizar, desintoxicar y almacenar diversos compuestos tóxicos.

Los signos de que un perro tiene una enfermedad hepática pueden variar e incluyen pérdida de apetito, vómitos, ulceración estomacal, diarrea, convulsiones u otros problemas neurológicos, fiebre, problemas de coagulación de la sangre, ictericia (un tinte amarillo perceptible en la piel, las membranas mucosas y los ojos), acumulación de líquido en el abdomen, micción y sed excesivas, cambios en el tamaño del hígado y pérdida de peso. Las hemorragias gastrointestinales pueden observarse en animales con enfermedades hepáticas debido a úlceras o problemas de coagulación de la sangre. El conocimiento por parte del veterinario de las posibles causas de cada uno de estos signos le ayuda a diagnosticar la enfermedad y a proporcionar el tratamiento adecuado.

Valores elevados del hígado en los perros

El hígado es uno de los órganos vitales de su perro, ya que contribuye a la digestión, la coagulación de la sangre y la desintoxicación de la misma, entre otras funciones. Por eso, cuando no funciona bien, la salud de su perro puede verse seriamente afectada. Cuanto antes se detecte la enfermedad hepática, más posibilidades tendrá su perro de recuperarse. Informarse sobre las enfermedades hepáticas en los perros, incluyendo lo que hay que vigilar y lo que hay que esperar si su perro desarrolla una enfermedad hepática, es muy importante para su tranquilidad y para la salud de su perro.

En los perros mayores, el cáncer y la enfermedad de la vesícula biliar pueden provocar una enfermedad hepática, afirma Graham. Los perros pequeños pueden nacer a veces con una derivación hepática, que es una condición genética que puede causar una enfermedad hepática si no se corrige quirúrgicamente.

Algunas razas de perros también pueden ser más susceptibles a las enfermedades hepáticas. Los labradores pueden tener un mayor riesgo de desarrollar una enfermedad hepática a causa de los medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE), que se utilizan habitualmente para tratar la artritis en los perros mayores. Los bedlington terrier suelen tener una alta susceptibilidad genética a la enfermedad por almacenamiento de cobre, que puede provocar una enfermedad e insuficiencia hepática. También se sospecha que otras razas, como los Doberman pinschers, los dálmatas y los West Highland white terriers, tienen una predisposición genética a la enfermedad hepática, dice Graham.

Coste del tratamiento de las enfermedades hepáticas en los perros

El hígado de su perro es un órgano vital que es sensible a los daños y las enfermedades. Por esta razón, es importante reconocer los primeros signos de enfermedad en su perro para que pueda ser tratado rápidamente. Siga leyendo para obtener más información sobre las enfermedades hepáticas comunes en los perros, cómo se diagnostican y consejos para mantener a su perro sano y feliz.

El hígado es un órgano grande situado justo detrás del diafragma, cerca del estómago, el bazo y el intestino delgado. Desempeña importantes funciones, como la desintoxicación o la eliminación de sustancias de desecho, como los medicamentos o productos químicos perjudiciales para el organismo. El hígado ayuda a controlar el metabolismo mediante el uso de grasas, carbohidratos y proteínas. También produce proteínas esenciales, bilis para ayudar a la digestión de los alimentos y factores de coagulación de la sangre.

Los signos que sugieren una enfermedad hepática incluyen un tinte o color amarillo en la piel o en la parte blanca de los ojos. Este tono amarillo también se conoce como ictericia. Los perros también pueden desarrollar una hinchazón en el abdomen o en la zona del estómago, denominada ascitis, que se produce cuando hay una acumulación de líquido.

Fases de la insuficiencia hepática en perros

El hígado influye en la mayoría de los procesos químicos del organismo, desde la ayuda a la digestión hasta la eliminación de toxinas de la sangre. Dada su destacada y variada función en el mantenimiento de la salud del animal, las enfermedades hepáticas son relativamente frecuentes en los perros.

Tanto los factores genéticos como los ambientales pueden afectar negativamente al hígado y causar enfermedades. Dependiendo de la gravedad y de la causa subyacente, los veterinarios afirman que muchos perros con enfermedades hepáticas pueden tener una vida larga y saludable. La detección precoz de la enfermedad hepática en los perros mejora el pronóstico, lo que subraya la importancia de acudir regularmente a las consultas veterinarias.

El hígado, el órgano más grande del abdomen, se encarga de realizar una serie de funciones bioquímicas vitales. “Fabrica importantes proteínas necesarias para la coagulación, elimina las toxinas de la sangre, metaboliza los fármacos y las fuentes de energía, produce ácidos biliares necesarios para la digestión y almacena vitaminas, minerales y glucógeno”, afirma el Dr. Hyunmin Kim, director del personal veterinario de medicina comunitaria de ASPCA.

Por Sofía Salome

Hola mundo, soy Sofía Salomé copywriter de Damboats.es