La fruta es mala para el hígado

Los polifenoles presentes en la manzana mantienen bajo control los niveles séricos y lipídicos del hígado. Las manzanas llevan pectina y ácido málico que ayudan a eliminar toxinas y carcinógenos. Las manzanas tienen propiedades antiinflamatorias que te protegen contra el hígado graso.2. Té verdeEl té verde es conocido por su impulso de antioxidantes. Consumir 2 tazas de té verde cada día ayuda enormemente a mantener a raya los problemas de hígado graso no alcohólico.3. Remolachas y zanahorias

Las betalaínas, la betacianina y la betanina presentes en las remolachas protegen el hígado de las lesiones debidas a los carcinógenos, mientras que los antioxidantes de las zanahorias reducen la toxicidad del hígado. Por lo tanto, debe procurar comer una taza de remolachas o zanahorias tres veces por semana o tomar un vaso de zumo de remolacha o zanahoria cada día.4. LimonesLos limones son ricos en vitamina C y protegen el hígado del daño oxidativo. Debes beber limón en agua caliente cada mañana para obtener los mejores beneficios o añadirlo al té verde para una doble dosis de buena salud.5. Verduras de hoja verdeLas verduras de hoja verde como las espinacas, la berza, la mostaza, etc., evitan los problemas de hígado graso debido a su contenido en antioxidantes y vitaminas. Para que el hígado funcione bien, debes procurar comer una taza de verduras de hoja verde en tu dieta diaria.

Bueno para el hígado

El hígado es el dispositivo de desintoxicación integrado en el cuerpo que ayuda a eliminar las sustancias nocivas de la sangre. También desempeña un papel crucial en la creación de energía a partir de los alimentos que se ingieren y almacena nutrientes clave. El hígado es uno de los órganos más importantes del cuerpo, por lo que es vital que hagas lo posible por mantenerlo en buen estado de funcionamiento.

Sin embargo, es fácil que la grasa se acumule en el hígado y le impida hacer su trabajo. La HGNA es una enfermedad silenciosa que tiende a aparecer sigilosamente. Es una de las enfermedades hepáticas más comunes en Estados Unidos.  Usted puede tener un mayor riesgo de padecer NAFLD si hay enfermedades hepáticas en su familia, si vive con obesidad, diabetes tipo 2 o si tiene más grasa alrededor del estómago.

Comer demasiado azúcar es uno de los factores que pueden provocar un hígado graso, por lo que la diabetes de tipo 2 (y otros problemas metabólicos) son factores de riesgo de la NAFLD. La resistencia a la insulina, que suele observarse en quienes padecen obesidad y diabetes de tipo 2, hace que el organismo se esfuerce por regular la cantidad de azúcar y grasa en el cuerpo y favorece el almacenamiento de grasa en el hígado.

Síntomas del hígado graso

El hígado se encarga de gestionar todas las grasas, proteínas e hidratos de carbono que se ingieren. También controla la producción de otras numerosas grasas y proteínas importantes para las funciones corporales. Hay muchos alimentos y bebidas que una persona puede consumir para ayudar a proteger el hígado.

El café, según informa, parece reducir la acumulación de grasa en el hígado. También aumenta los antioxidantes protectores en el hígado. Los compuestos del café también ayudan a las enzimas hepáticas a eliminar las sustancias cancerígenas del organismo.

El consumo de avena es una forma fácil de añadir fibra a la dieta. La fibra es una herramienta importante para la digestión, y las fibras específicas de la avena pueden ser especialmente útiles para el hígado. La avena y los copos de avena tienen un alto contenido de compuestos llamados beta-glucanos.

informes, los beta-glucanos son muy activos biológicamente en el cuerpo. Ayudan a modular el sistema inmunitario y a combatir la inflamación, y pueden ser especialmente útiles en la lucha contra la diabetes y la obesidad.

La revisión también señala que los betaglucanos de la avena parecen ayudar a reducir la cantidad de grasa almacenada en el hígado en ratones, lo que también podría ayudar a proteger el hígado. Sin embargo, son necesarios más estudios clínicos para confirmar este beneficio en humanos.

El azúcar de la fruta es malo para el hígado graso

En un organismo sano, el hígado elimina las toxinas y produce bilis, una proteína que descompone las grasas en ácidos grasos para que puedan ser digeridos. La enfermedad del hígado graso daña el hígado e impide que funcione tan bien como debería, pero los cambios en el estilo de vida pueden evitar que empeore.

La cantidad de peso que debe perder para tratar la NAFLD dependerá de la cantidad de exceso de grasa corporal que tenga. Su equipo médico puede ayudarle a decidir un objetivo de pérdida de peso adecuado en función de su estado de salud general. Una dieta rica en nutrientes, basada en alimentos integrales y rica en fibra, proteínas y grasas insaturadas

descubrió que el consumo de espinacas reducía específicamente el riesgo de NAFLD, posiblemente debido a los nitratos y a los distintos polifenoles que se encuentran en esta hoja verde. Curiosamente, el estudio se centró en las espinacas crudas, ya que las cocidas no obtuvieron los mismos resultados. Esto podría deberse a que la cocción de las espinacas (y de otras verduras de hoja verde) puede reducir el contenido polifenólico y la actividad antioxidante.

de la dieta y las enfermedades hepáticas señala que las legumbres, como las lentejas, los garbanzos, la soja y los guisantes, no sólo son alimentos densos desde el punto de vista nutricional, sino que también contienen almidones resistentes que ayudan a mejorar la salud intestinal. El consumo de legumbres puede incluso ayudar a reducir la glucosa y los triglicéridos en sangre en individuos que viven con obesidad. Además, un estudio de 2019 descubrió que las dietas ricas en legumbres ayudaban específicamente a reducir la probabilidad de padecer NFALD.

Por Sofía Salome

Hola mundo, soy Sofía Salomé copywriter de Damboats.es